martes, 4 de diciembre de 2012

La Fatiga y sus efectos al conducir

¿Te sientes fatigado? Si la respuesta es afirmativa has de saber que supone un riesgo muy importante para la conducción. Puede parecer que es un factor ajeno al conductor, que no depende de él, pero tener que saber qué supone para estar alerta.

La fatiga, uno de los principales factores de riesgo en la conducción

La fatiga es uno de los principales factores de riesgo en la conducción. ¿Qué supone? Que es fácilmente reconocible, por lo que si sigues una serie de consejos sabrás detectarla y actuar como es debido. La fatiga provoca un descenso en el rendimiento del conductor debido al esfuerzo físico y psíquico realizado durante el acto de conducción.
Y es que la fatiga no es tan sólo cansancio fatigo como se suele pensar.
Determinadas circunstancias hacen que aparezca la fatiga más fácilmente ya que requieren una mayor concentración o hacen que la conducción sea más incómoda o difícil. Por ejemplo, conducir por una vía con mucho tráfico o por una que tenga el pavimento en mal estado, así como conducir por una vía poco conocida o bajo condiciones climatológicas adversas. Por tanto, ya que lo sabes, intenta evitar esas circunstancias cuando sea posible.

 Del mismo modo, conducir con una mala ventilación en el coche o a una temperatura elevada también puede afectar al estado psicofísico del conductor. Ten en cuenta que para prevenir la fatiga, por raro que parezca, hay que ventilar bien el coche y mantener una temperatura alrededor de los 23 grados centígrados.

Además, también puede afectarte negativamente un mal diseño del asiento o de otros elementos del vehículo, por lo que antes de comprar un coche o incluso de alquilar un vehículo comprueba en la medida de lo posible que éste se adapte a ti.

Pero también hay condiciones que dependen propiamente del conductor. Conducir durante largos periodos de tiempo sin descansar o mantener una velocidad elevada durante mucho rato también incrementa la aparición de la fatiga.

A los primeros síntomas de cansancio deja de conducir y desansa

Con todo, para intentar evitarlo, es recomendable conducir con una postura adecuada e intentando descansar más frecuentemente. Cuando veas que empiezas a moverte mucho en el asiento o que empiezas a cometer más fallos de los comunes o habituales, o incluso que empiezas a perder capacidad auditiva, es que la fatiga está haciendo su aparición. Descansa y tómatelo con calma.

Fuente: ReservasdeCoches.com