viernes, 23 de diciembre de 2011

Consejos para conducir con frio en invierno

¡Qué duro y frío es el invierno! Y a la hora de conducir tenemos que tener claro que también afecta. No sólo influye en el coche (peligro de congelación de algún líquido, por ejemplo, o consumo de gasolina para poner la calefacción), sino en nosotros como conductores. Por eso mismo, porque queremos que la conducción en invierno sea lo más segura posible, aquí van una serie de consejos.

En primer lugar, intenta que la temperatura del coche sea adecuada. Si el interior del coche está muy frío te verás obligado a llevar varias capas de ropa que impedirán que te muevas con soltura y comodidad, tus maniobras pueden verse afectadas. Por ahorrar en gasolina y no poner la calefacción puedes provocar algo peor.

Si pones la calefacción, algo normal, ten en cuenta que puede entrarte morriña o somnolencia. Para evitarlo, has de estar concentrado, pararte cada vez que sea necesario para descansar y ayudarte de otros elementos como la radio. En algunas ocasiones esta somnolencia puede verse incrementada como, por ejemplo, con las comidas abundantes (tan corrientes en fiestas).

No olvides tampoco estar pendiente del tiempo, ya que en invierno este suele empeorar. La nieve, el hielo y la niebla pueden convertirse en tu peor enemigo. No debes salir en coche sin el equipamiento correspondiente, unas cadenas reglamentarias y sin informarte bien de las condiciones climatológicas.

Intenta llevar siempre el coche cargado de gasolina ya que, a parte de ganar estabilidad y adherencia, podrás prevenir el verte sin gasolina por un exceso de consumo. En caso de quedarse inmovilizado, tendrás calefacción durante más tiempo. Aun así, es bueno llevar en el coche algunas mantas, sobre todo si planeas algún viaje largo por carretera, ya que nunca sabes cuando te pueden hacer falta.

Consejos de Alquiler de Coches - ReservasdeCoches.com

martes, 6 de diciembre de 2011

Calzado adecuado para conducir

¿Planeas qué calzado ponerte cuando te vas a poner al volante? A menudo es una de las cuestiones que menos se piensan, cuando el vestuario es algo muy importante a la hora de conducir ya sea tu propio coche o un coche de alquiler. Una ropa demasiado ceñida puede llegar a apretar y agobiar al cabo de las horas, y una ropa demasiado ancha pueda molestar si cuelga en exceso. Pero, por encima de la ropa, es más importante el calzado. De cómo sean los zapatos y de su estado pueden depender nuestro control de los pedales y la respuesta que obtendremos del vehículo.

Muchas personas llevan un calzado especial en el maletero para conducir,siempre con ellos en cualquier viaje, de manera que si estás conduciendo un coche de alquiler no te olvides de llevarlos también.

Para que un calzado sea cómodo debe cumplir con una serie de condiciones. El más adecuado suele ser aquel que se denomina ergonómico. Un buen calzado es primordial para pisar los pedales con fuerza y precisión en el momento menos esperado.

¿Qué características se deben tener en cuenta para escoger el calzado adecuado para conducir?

Para empezar, flexibilidad. El zapato debe adaptarse a los movimientos de nuestro pie resultando una segunda piel que transmita al exterior los gestos y acciones realizados por el conductor. También debe ser firme para que, por ejemplo, en una frenada de emergencia, el accionado no se quede en una simple caricia sobre el pedal.

Obviamente el zapato debe sujetar el pie correctamente, que no baile como se suele decir de manera coloquial. Además, debe ser cómodo, ya que no hay nada más molesto que un zapato incómodo. Desde aquí "recomendamos que los zapatos no sean nuevos" ya que, por norma general, es difícil que un zapato funcione a la primera.

Por supuesto, nada de tacones. No es nada recomendable conducir con tacones o plataformas, es mejor sentir los pedales con la planta del pie por completo y que no haya interferencias. Los zapatos más cómodos suelen ser las zapatillas deporte aunque, como en todo, dependerá de cada persona y del pie de ésta.